Por qué odio Saturno
Kyle Baker
Planeta DeAgostini, 2010
208 páginas / blanco y negro
Precio: 18,95 euros
ISBN: 978-84-674-8725-1
Dos
décadas más tarde de su publicación, en 1990, Por qué odio Saturno (Planeta
DeAgostini, 2010), una de las obras maestras de la historietista y
animadora norteamericana Kyle Baker (Queens, Nueva York, 1965), se ha visto
de nuevo reeditada en nuestro país.
Está protagonizada por una excéntrica columnista llamada Anne
Merkel quien sólo es feliz cuando se queja de sus editores, de estar
soltera en Nueva York o de, entre
otras decenas de cosas, quedarse sin whisky. Pero cuando su hermana, a la que
hace bastante tiempo que no ve, aparece de pronto afirmando que es la Reina
de las Astro-Chicas de Cuero de Saturno, la quejumbrosa Anne
va a desear no haberse lamentado nunca de nada.
En Por qué odio Saturno, Baker da
rienda suelta a todo su talento a la hora de pergeñar una historia llena de
ironía, cierta crítica social y brillantes momentos absurdos; una divertidísima
novela gráfica repleta de inteligentes giros inesperados capaces de mantener al
lector expectante en cada momento.
Realizado
en formato de telenovela, con un planteamiento estético tan llamativo como
atractivo, donde los diálogos se encuentran fuera de las viñetas al estilo del
cómic clásico – como Príncipe Valiente -, Por qué odio
Saturno es una obra rompedora para su época.
Kyle Baker comenzó su carrera en los años ochenta colaborando con
distintas cabeceras, entre ellas Marvels
Spider-Man y New Mutants. También
trabajó para Disney en la adaptación
de A
través del espejo y lo que Alicia encontró allí [cuento infantil
escrito por Lewis Carroll, en 1871, continuación
de Las
aventuras de Alicia en el país de las maravillas] y en la película de Dick
Tracy. Además, sin dejar de trabajar para la industria de animación, Baker publicó sus dibujos en revistas y
diarios tan populares como The New York
Times, Esquire, Rolling Stone y New
York Magazine. A lo largo de su carrera ha ganado numerosos premios, entre
los que destacan sus ocho Eisner.
En definitiva, una lectura más que recomendable para
aquellas personas adultas que no suele leer tebeos que quizá con el paso de los
años entre en el archivo eterno de los cómics de culto.