viernes, 12 de diciembre de 2008

Un gurú imperecedero

Las enseñanzas de Mr. Natural:
Iluminaciones

Robert Crumb
La Cúpula, 2008
142 paginas / blanco y negro
Precio: 18 euros
ISBN: 978-84-7833-846-7

Ediciones La Cúpula, fiel a su filosofía empresarial, sigue apostolando, ups, apostando por el cómic underground en nuestro país para mayor gloria de sus aficionados. Las Enseñanzas de Mr. Natural: Iluminaciones es el cuarto recopilatorio que la editorial catalana publica de Mr. Natural, anciano gurú de la contracultura, un personaje cachondo, divertido y lisérgico. Y además es la decimosexta obra que publica de Robert Crumb (Filadelfia, 1943).
En la California de finales de los sesenta, en pleno auge de la psicodelia y del flower power, el americano fue el auténtico fundador del llamado cómic underground y hoy es la figura más destacada de dicho movimiento. Creó personajes que pronto se convirtieron en iconos de la contracultura, como Mr. Natural, Fritz the Cat, Flakey Foont, Shuman the Human o Angelfood McSpade. Ellos le sirvieron para abordar abiertamente temas tabú en los tebeos de entonces como el sexo y la crítica política. También fue ilustrador de portadas de bandas de la época como, por ejemplo, Cheap Thrills (1968), del grupo Big Brother and the Holding Company, cuya cantante era, ni más ni menos que Janis Joplin.
A pesar de ser uno de los más conocidos autores del noveno arte durante más de 40 años, Robert Crumb siempre ha desarrollado su carrera al margen de la industria, lugar desde el que ha seguido creando historietas tan brillantes como políticamente incorrectas.
Su estilo, en el que se mezclan influencias de artistas de los primeros años del cómic, es totalmente reconocible y ha tenido una repercusión enorme en la historia del cómic mundial. Su influencia sobre autores americanos contemporáneos – Peter Bagge, Joe Matt, Daniel Clowes… - y europeos – por ejemplo, los españoles Miguel Ángel Gallardo, Max… - ha sido evidente. Por todo ello, Crumb es uno de los grandes artistas del siglo XX, uno de esos clásicos que cualquier aficionado al cómic debe conocer.

sábado, 6 de diciembre de 2008

Ejercicio de memoria

No te olvides de recordar
Peter Kuper
Astiberri, 2008
272 páginas B/N
Precio: 21 euros
ISBN: 978-84-96815-72-8

El mundo de la novela gráfica vive una auténtica explosión de ese subgénero llamado slice of life (literalmente: «rebanada de vida»). El mundo del cómic rebosa de historias costumbristas de tipo autobiográfico, descritas al mínimo detalle. Forman parte destacada del slice of life autores como Peter Bagge, Daniel Clowes, Joe Matt, Joe Sacco, Ramón Boldú o Craig Thompson pero casi todos los grandes han visitado el género en alguna ocasión sin circunscribirse a él. Aquí me refiero a Jiro Taniguchi, Will Eisner, Lewis Trondheim…y ahora a Peter Kuper (EE.UU., 1958).
Al igual que esos excelentes autores tentados por el slice of life que no han pretendido convertir al lector en un mero voyeur de vidas de dibujantes, Kuper nos presenta No te olvides de recordar (Astiberri, 2008), una brillante novela gráfica autobiográfica en la que ha invertido más de 13 años. En ella el dibujante e ilustrador americano reflexiona acerca de su vida como marido, padre y amigo entremezclando de forma brillante sucesos de su vida actual y sus problemas de padre primerizo con sus recuerdos de adolescencia y juventud. La descripción detallada e hilarante de sus metas de entonces - perder la virginidad, colocarse, la masturbación como ejercicio diario – parecen llevarnos inevitablemente a Joe Matt o Ramón Boldú.
Pero Kuper, autor de varias adaptaciones de Kafka al cómic así como de portadas para Time y Newsweek, es mucho más profundo. Va más allá para, a través de una mirada madura e inteligente, conducirnos por los altibajos del matrimonio y la paternidad, incluidos la depresión posparto de su esposa y su consiguiente pérdida de interés en el sexo, los miedos que amenazan a su hija, sus reflexiones políticas – magníficas sus páginas en las que parodia la figura de George Bush -, la manera en que disfruta de su hija - y también cómo le vuelve loco - y la tristeza por la pérdida de la amistad.

domingo, 30 de noviembre de 2008

Armario con dos puertas

Fun Home: una familia tragicómica
Alison Bechdel
Radom Haus Mondadori (2008)
234 páginas / color bitono
Precio: 18,90 euros
ISBN: 978-84-39721-04-8

Fun Home: Una familia tragicómica (2006) es una de las obras más importantes y definitivas que ha dado la novela gráfica norteamericana en las últimas décadas. Su calidad narrativa, su densidad intelectual no exenta de fina ironía y humor, su perfecta armonía descriptiva entre textos y viñetas son tales que la frontera entre cómic y literatura queda difuminada. Pero quizá por lo mismo, Fun Home resulte una obra difícil, exigente, en cierta medida pretenciosa y no apta para todos los públicos. Su autora es la dibujante norteamericana Alison Bechdel (Lock Haven, Pennsylvania, 1960). Bechdel es una artista prácticamente desconocida en España para el gran público ya que hasta la fecha sólo Ediciones La Cúpula había editado, dentro de la colección dirigida al público gay y con el explicito título de Unos bollos de cuidado, tres álbumes recopilatorios de su serie más conocida: la tira de prensa titulada Dykes To Watch Out For.
Pero este aspecto, el de la homosexualidad de su autora, no debe servir para prejuicios o pérdidas de perspectiva acerca de un cómic exquisito. Es evidente que el lesbianismo de la autora juega un papel importante en la historia. No en vano se trata de una narración autobiográfica que entre otros aspectos describe el descubrimiento y aceptación de dicha homosexualidad por parte de Alison al igual que revela la historia de un padre gay que jamás quiso o pudo salir del armario. Precisamente el personaje del padre, profesor de inglés al igual que la madre, y encargado de un negocio familiar que no es otro que la funeraria del pueblo – de ahí el título del álbum Fun Home, la casa feliz – es quien en realidad vertebra, como hilo conductor, toda la trama. O quizá, más exactamente, la relación amor – odio entre padre e hija. Tampoco debe pasarse por alto el papel fundamental que juegan libros como La muerte feliz, de Albert Camus; En busca del tiempo perdido, de Marcel Proust, El gran Gatsby, de Scott Fitzgerald y sobre todo Ulysses, de James Joyce. Todos ellos lecturas fascinantes que mantienen obsesionado al padre durante toda su vida:
Si además esta novela gráfica cuenta con una excelente reproducción, colores perfectos, papel adecuado y una acertada rotulación cualquier sibarita del cómic no podrá más que gozar con la obra que le ha caído entre las manos.

jueves, 27 de noviembre de 2008

Re-flexiones mentales

Ángel Sefija:
Desde el quinto pino

Mauro Entrialgo
Astiberri, 2008
80 paginas color
Precio: 12 euros
ISBN: 978-84-96815-75-9
www.astiberri.com

Hay comics que narran historias; otros sirven para pasar el rato; también hay de los didácticos y no faltan aquellos otros que buscan concienciar. La nueva entrega del dibujante Mauro Entrialgo (Vitoria, 1965), ésa que bajo el título Desde el Quinto Pino reúne las planchas 298 a 373 de la serie Ángel Sefija publicadas originalmente en el semanario El Jueves, entre 2006 y 2008, son pildoritas concentradas de espabilina® para nuestras mentes adormecidas; tablas suecas completas de ese humor repleto de ironía que parte la caja. Y es que Ángel Sefija desde el Quinto Pino tiene un poquito de todo: recoge historias muy cercanas que la mayoría de todos hemos vivido, estamos viviendo o viviremos; sirve para pasar el rato, sobre todo en el cagadero - termino especializado recogido en el propio álbum - gracias a su formato original de historia por página; es didáctico, vaya si lo es; y conciencia de tal forma que uno termina afirmando a voz en grito: ¡mecagüen, desde hoy no me toca los huevos ni dios!
Con Ángel Sefija desde el quinto pino ya son cinco los volúmenes recopilatorios publicados - tres con Astiberri, tras Ángel Sefija por tercera vez (2006), y Ángel Sefija con cuatro ojos (2007) – de Sefija, un escritor frustrado, madurillo y gran observador, que diserta con humor, ironía y desarmante lógica sobre los más variados temas que se le ponen a tiro en el día a día. Si a todo lo arriba se descrito se le añade que este el cómic lo introduce, con perdón, el periodista, escritor, guionista y de una vez prologuista de Mauro Entrialgo, Pepe Colubi, no debería hacer faltar apostillar que este es el regalo de Navidad definitivo que usted nunca se atrevió a soñar para el pánfilo de su cuñado.

Un África muy normal

Aya de Yopougon 2
Marguerite Abouet / Clément Oubrerie
Norma Editorial, 2008
128 paginas / color
Precio: 18 euros
ISBN: 978-84-9847-531-9
http://www.normaeditorial.com/

En los dos volúmenes editados hasta la fecha en España de Aya de Yopougon, premio al mejor primer álbum en el salón de Angoulême 2006, la autora marfileña Marguerite Abouet, con la ayuda del magnífico dibujante francés Clément Oubrierie – sus ilustraciones de trazo fino con un color que asemeja al de la acuarela dan al conjunto una sensación de gran calidez -, describe el día a día de la gente de un África donde no todo son conflictos bélicos ni pobreza extrema. La primera reacción de los habitantes del denominado primer mundo ante tal tranquilidad social, acostumbrados a seguir «la actualidad africana» a ritmo de genocidios y hambrunas, de metralletas y pateras, es de enorme extrañeza. Apenas se pueden imaginar que en un continente como el africano existan espacios apacibles donde uno pueda divertirse y vivir en paz. Uno de ellos es Yopougon, el bullicioso barrio de Abiyán, capital de Costa de Marfil, donde tiene lugar gran parte de la historia protagonizada por Aya, Adjoua y Bintou, tres jóvenes y guapas amigas del barrio con muchas ganas de vivir y muy distintas actitudes frente al futuro. Mientras la mayor preocupación de Adjoua y Bintou es la de escaparse de la vigilancia de sus padres para ir a la discoteca a bailar y pasar el rato con otros chicos rebeldes como ellas, Aya desea estudiar para convertirse en una buena doctora.
Aunque pueda decirse que Aya de Yopougon es un tebeo para adolescentes, no se trata de una obra ñoña y edulcorada, donde todos los temas se tocan con frivolidad. Tras la supuesta apariencia de la historia simple y costumbrista de tres amigas adolescentes en Costa de Marfil encontramos un cómic inteligente, divertido y muy bien narrado que muestra el trasfondo de una realidad africana, tan real como la onerosa que conocemos a través de los medios, capaz de interesar al lector adulto como un atractivo medio para aprender sobre el África subsahariana.

viernes, 7 de noviembre de 2008

Una de vaqueros

Durango 1
Yves Swolfs
Planeta DeAgostini, 2008
144 paginas color
Precio: 13,95 euros
ISBN: 978-84-674-5594-6

Al igual que en el séptimo arte, donde el western es uno de los géneros fundamentales en el contexto de lo que se entiende como ‘cine clásico’, el cómic siempre ha sido muy receptivo a ese capítulo de la historia de los Estados Unidos popularmente conocida como la Conquista del Oeste. El cómic, insisto, ha reflejado a menudo y con pasión la iconografía más característica de tal periodo - sombreros tejanos, pistolas, chalecos, caballos, desiertos, cañones, ciudades-calle, saloons, ranchos, diligencias, indios...-, creando series tan destacables como Blueberry, de Jean Michel Giraud; Comanche, de Hermann; o Jonathan Cartland, de Michel Blanc-Dumont; por nombrar tres de auténtico culto entre una lista que resultaría interminable y a la que pertenece, en lugar destacado, Durango.
Como si del mismísimo Sergio Leone de la viñeta se tratara, su autor, el belga Yves Swolfs (Bruselas, 1955), comenzó a publicar a principios de los ochenta esta serie que reescribe las fórmulas del spaghetti western a lo largo de sus 14 álbumes editados hasta la fecha. En ellos se relatan las peripecias de pacificador llamado Durango. Inspirado sin vergüenza alguna en el Clint Eastwood de La Trilogía del dólar de Sergio Leone (a saber: Por un puñado de dólares, La muerte tenía un precio y El bueno, el feo y el malo) al que se le añaden abundantes dosis de ese western abigarrado y violento propio del gran Sam Peckinpah, Durango aplica una justicia que todos comprenden en el Salvaje Oeste: la de su pistola Mauser C96.
El formato elegido por Planeta DeAgostini para este primer tomo de Durango que recopila las tres primeras entregas de la serie - Los perros mueren en invierno, La fuerza de la ira y Trampa – es el llamado BD Book. Este formato reduce el tamaño original de la obra en aras de una mejor relación número de páginas / precio. Sin embargo, esa misma reducción y la dudosa calidad en el escaneado de varias páginas dejan insatisfecho al más sibarita lector de tebeos.
En cuanto al estilo, Durango muestra a Swolfs, hoy bien conocido en nuestro país por obras como Leyenda o James Healer, como un dibujante algo primerizo, hábil narrador y poseedor de un estilo clásico y detallista influenciado por Giraud, que va mostrando una evolución gradual y constante hasta convertirse él mismo en un maestro.

domingo, 26 de octubre de 2008

La tiene (re)clara

Las aventuras de Blake y Mortimer:
El santuario de Gondwana

Yves Sente y André Juillard
Norma Editorial, 2008
56 paginas color
Precio: 15 euros
ISBN: 978-84-9847-559-3
www.normaeditorial.com

En la mejor tradición franco-belga del género aventurero-literario se encuentra la serie de culto Las aventuras de Blake y Mortimer. Creada en 1946 por el autor belga Edgar P. Jacobs, su última entrega, El santuario de Gondwana (Norma editorial, 2008), acaba de ser publicada en nuestro país, en esta ocasión con guión de Yves Sente y dibujo de André Juillard (Las siete vidas del Gavilán, Pluma al viento, El largo viaje de Lena…). Respetando escrupulosamente las enseñanzas de su maestro, amigo y mentor Hergé, Jacobs hizo suyos el trazo limpio, los colores planos, la renuncia absoluta a efectos de sombra o de luz y el desarrollo lineal de una historia concienzudamente documentada, todos ellos elementos característicos de ese estilo conocido en el mundo del cómic como ‘línea clara’ y que muchos asocian, no sin equivocación, al padre de Tintín.
Tras la muerte de Jacobs, en 1987, Las aventuras de Blake y Mortimer han sido continuadas hasta hoy por diferentes autores como Bob de Moor así como por las duplas Jean Van Hamme y Ted Benoit e Yves Sente y André Juillard, todos ellos elegidos por su respeto por la línea clara.
El santuario de Gondwana lleva al profesor Philip Angus Mortimer, físico nuclear de origen escocés, y al capitán Francis Percy Blake, oficial galés del servicio secreto de Su Majestad, la pareja que da nombre a la serie y recuerda a la formada por Sherlock Holmes y el doctor Watson, al corazón de África para investigar unos restos de una antigua civilización, presuntamente más avanzada que la humana. No se darán cuenta de que su archienemigo el coronel Olrik les ha estado siguiendo mucho más cerca de lo que podrían imaginarse. Como gran novedad destaca el papel cada vez más importante que juegan las mujeres en sus aventuras.

sábado, 25 de octubre de 2008

Los huevos de Picasso

El Salón
Nick Bertozzi
Astiberri, 2008
192 páginas color
Precio: 22 euros
ISBN: 978-84-968-1536-0
www.astiberri.com

En El Salón (Astiberri, 2008), el autor norteamericano de cómic independiente Nick Bertozzi no ha dudado en ‘rehacer’ de forma muy personal e imaginativa una parte fundamental de la historia del arte – el origen del cubismo – a la hora de acometer una inteligente trama en la que se funden elementos del cine de suspense - unos misteriosos y brutales asesinatos - y del realismo mágico latinoamericano - cierta absenta de color azul con poderes místicos capaces de introducir al que la bebe en un cuadro -. Aclamada por crítica y público, el último cómic de Bertozzi ha recibido una dosis extra de publicidad en los EE.UU a causa del juicio por obscenidad a un librero de Georgia por vender un cómic en el que se le ve la polla a Picasso, entre otras escenas de ‘sexo explícito’ que en Europa nos resultan inocentes.
Con el París de 1907 como escenario, El Salón recrea libremente las tertulias reales que tuvieron lugar en el domicilio parisino de Gertrude Stein, mecenas de varios de los intelectuales y artistas más influyentes de la vanguardia artística del siglo XX como fueron Pablo Picasso, Georges Braque, Guillaume Apollinaire, Erik Satie o Alice B. Toklas, entre otros. A todos ellos. Bertozzi les convierte en directos protagonistas de la trama.
En cuanto a lo gráfico, en El Salón destacan la medida planificación de unas páginas apaisadas que, en retículas rígidas de cuatro viñetas ligeramente alargadas, parecen dar un homenaje a las tiras de los periódicos; el fascinante uso del color, en total coherencia con unos dibujos que se ajustan como guante de seda a lo que se quiere contar; la profundidad de unas viñetas, con personajes dibujados desde todos los ángulos posibles en segundos y terceros planos que dotan a las páginas de un efecto tridimensional.
Por todo ello, El Salón es un trabajo destinado a un público adulto y sibarita, en contraposición con Houdini: El rey de las esposas (Astiberri, 2007), su anterior trabajo junto a Jason Lutes, cuyo dibujo había sido conscientemente simplificado para acercarse a un público juvenil y no necesariamente relacionado con la historieta.

jueves, 16 de octubre de 2008

Todo al Uno

Batman Año Uno
Frank Miller y David Mazzucchelli
Planeta DeAgostini, 2008
144 páginas color
Precio: 15,95 euros
ISBN: 978-84-67452-64-8

Entre los aficionados adultos a los comics de superhéroes hay unanimidad a la hora de señalar Watchmen (1986), de Alan Moore y Dave Gibbons; El regreso del caballero oscuro (1986) de Frank Miller y Batman: Año Uno (1987-88), ésta con guión de Miller y dibujo de David Mazzuchelli, como tres de las obras cúspides del género. Es más, estudiosos de la Universidad de Ohio han constatado un hecho sorprendente. Cualquier conversación entre cómic-frikis, sea en librería especializada, comicteca u otro lugar donde habiten dichos especimenes, durante la que se nombre alguno de los títulos arriba mencionados, se detiene en seco. Entonces se hace un silencio de algunos segundos pleno de recogimiento admirativo –algunos incluso se santiguan - para luego retomar la charla en el punto donde se había detenido. Y es que los tres revolucionaron por completo el panorama del cómic de superhéroes otorgándole un nuevo enfoque más adulto, oscuro y crepuscular. Ahora, gracias a la nueva reedición en formato de lujo que ha lanzado al mercado Planeta DeAgostini se nos ofrece una oportunidad de oro para acercarnos a esta rompedora reinterpretación del origen de Batman: quién es y cómo llegó a serlo pergeñada por un Miller en estado de gracia que usa magistralmente elementos de género negro para narrar los inicios del Hombre Murciélago, y un Mazzucchelli que dota al personaje del mejor dibujo que haya tenido nunca. Esta edición incluye la novela gráfica al completo, una introducción de Denny O´Neil y un nuevo epílogo ilustrado de David Mazzucchelli. Completando la edición hay casi 40 páginas de material nunca visto sobre la génesis y desarrollo del proyecto, con bocetos e incluso páginas del guión original.

Kómiks kafkianos

Yo maté a Adolf Hitler
Jason
Astiberri, 2008
48 paginas color
Precio: 12 euros
ISBN: 978-84-96815-70-4

John Arne Sæterøy (Molde, 1965), alias Jason, es un dibujante y guionista noruego que está considerado como uno de los grandes autores de la escena underground europea actual. Desde que iniciara su carrera, en 1981, Jason ha visto reconocida su obra con innumerables galardones nacionales e internacionales. El último en llegar ha sido, este mismo año, el prestigioso premio Eisner, una distinción equiparable a los Óscar cinematográficos.
Yo maté a Adolf Hitler (Astiberri, 2008), el quinto de sus títulos que se edita en España, combina ciencia ficción y reflexiones existenciales sobre dos suposiciones bien surrealistas: ¿Qué pasaría si viviéramos en un mundo en el que “asesino a sueldo” fuera una profesión tan normal como la de médico o abogado? ¿Qué pasaría si un científico contratara uno de esos asesinos para viajar atrás en el tiempo y matar a Adolf Hitler antes de su subida al poder?
En Yo maté a Adolf Hitler queda patente que Jason es un artista diferente. Su dibujo minimalista, su ritmo sobrio, su rigidez a la hora de distribuir las viñetas por página, sus hieráticos animales antropomórficos a los que, aparentemente, el artista noruego apenas permite mostrar cualquier signo de emoción – sólo en apariencia que no he visto jamás bichos dibujados expresar tanto con tan poco -, le sirven para ofrecernos un retrato original y absolutamente kafkiano de la fragilidad y soledad humanas. Pero también encontramos esa ternura, poesía y humor agudo que, subyacentes en toda su obra, le permiten conectar con el lector y hacer que sus libros sean no sólo brillantes ejercicios de estilo, sino también dotarlos de una profundidad que pocos autores consiguen alcanzar.

lunes, 22 de septiembre de 2008

Humor entre burkas


Kabul Disco 1:
Cómo no fui secuestrado en Afganistán

Nicolas Wild
Ponent Mon, 2008
176 paginas b/n
Precio: 15 euros
ISBN: 978-84-92444-02-1

Desde su propio título, Kabul Disco 1: Cómo no fui secuestrado en Afganistán (Ponent Mon, 2008) llama poderosamente la atención. Si además suma una divertida portada - que muy bien podría haber firmado Forges – en la cual el autor del cómic aparece caricaturizado en pleno baile de salón con una mujer con burka sobre el cañón de un viejo tanque soviético, la curiosidad sale de nuestra boca cual castiza frase de delicado vodevil: ¡Pero… esto… ¿de qué coño va?!

Nicolas Wild es un dibujante y guionista francés desconocido en nuestro país y más o menos en el suyo también. Un día recibe una llamada en el apartamento donde está de prestado. Le ofrecen un trabajo curioso: llevar al lenguaje del cómic la nueva constitución afgana. Wild que aquella tarde tiene libre, dice que sí y se va a Afganistán ya que le aseguran que «el país ha salido de la guerra». El resultado es la primera entrega de Kabul Disco, una historia auténtica aunque parezca del todo surrealista, narrada de forma ágil y didáctica. El tomo se ha complementado con páginas reales del cómic sobre la nueva constitución afgana y com algunas fotos de los propios protagonistas de turismo por la región.
Estilística - dibujo simple, efectivo y en cierta medida caricaturesco - y temáticamente es evidente encontrar coincidencias con obras de Guy Delisle (Shenzen, Pyongyang y Crónicas Birmanas); Art Spiegelman (Mause) o Marjane Satrapi (Persépolis), todos ellos autores que sin escatimar grandes dosis de humor, ternura e ironía dan un gran valor a la narración didáctica, uno de los principales valores de este tipo de novelas gráficas. Por cierto, ya hay un segundo volumen en preparación que se titulará Kabul Disco 2: Cómo no me convertí en opiómano en Afganistán.

jueves, 11 de septiembre de 2008

Catarsis onanista

Pobre cabrón
Joe Matt
La Cúpula, 2006
176 páginas – B/N
Precio: 9,95 euros
ISBN: 84-7833-690-7

El término catarsis (del griego Κάθαρσις, purga o purificación) es aplicado a menudo en la medicina, la tragedia griega, el psicoanálisis e incluso referente a la risa siendo descrito como una experiencia interior purificadora que es provocada por un estímulo externo.
En el caso del dibujante y guionista norteamericano Joe Matt (Filadelfia, Pennsylvania, 1963) queda claro que tal estímulo llega del sexo opuesto, cuya presencia latente le provoca constantes purificaciones de tipo onanista
con mayor o menor significado. Pobre cabrón (La Cúpula 2006), en inglés The Poor Bastard, muy bien hubiera podido llamarse en castellano Pobre pajero si se atiende al argumento de una novela gráfica del tipo slice of life - término usado para describir historias cotidianas de personas corrientes - en la que el autor no tiene ningún reparo en mostrarse como un consumado onanista, además de un cabronazo redomado.
Joe Matt recoge aquí los primeros seis números de su revista autobiográfica Peepshow donde describe con todo lujo de detalles sus constantes disputas con su pareja, sus paranoias y manías, su insaciable afición a la pornografía, su tacañería, su falta de tacto, sobre todo con las mujeres… Unos problemas que a menudo se parecen demasiado a los nuestros lo que provoca una risilla nerviosa al verlos ventilados en público.
Estilísticamente nos encontramos ante un autor influenciado por clásicos del comic underground como Art Spiegelman, Robert Crumb y Harvey Pekar; por los de su segunda generación como Peter Bagge, Daniel Clowes o David Lapham y también por Chester Brown y Seth, colegas de Matt en la editorial canadiense Drawn & Quarterly, que incluso se pasean por las páginas de Pobre cabrón.

jueves, 4 de septiembre de 2008

Viaje alrededor del mundo en seis comics

En los últimos años, el mundo del cómic ha evolucionado de forma asombrosa con un aumento espectacular tanto en demanda y oferta como en temática.
Este hecho ha resultado patente incluso a personas ajenas a esa maravillosa adición que es la lectura compulsiva de todo tipo de comics, antes tebeos, hoy también llamados novelas gráficas, que, de sopetón, han visto cómo aparecen en sus ciudades librerías especializadas y cómo crecen los estantes temáticos en las grandes superficies.
Por si fuera poco, el Ministerio de Cultura creó y entregó por vez primera, en 2007, el Premio Nacional del Cómic lo que supuso la definitiva dignificación de una inquietud artística que para sus irreductibles seguidores está considerada como el Noveno Arte.
Aprovechando tan favorables circunstancias les ofrezco un viaje singular alrededor del mundo a través de media docena de novelas gráficas, ergo comics, de autores e historias llegadas de lugares tan lejanos entre sí como Nueva Zelanda, Israel, Francia, EE.UU, Brasil, Afganistán, Marruecos, Corea del Norte, México y Menorca para que disfruten del placer de volar sin moverse de su sofá. Ahí van:

Hicksville (Ediciones del Ponent, 2003)
Dylan Horrocks entregó con esta novela gráfica una imagen melancólica alrededor de una ficción que bien podría ser borgiana. La acción se desarrolla en el legendario faro de Kupe, Nueva Zelanda, donde el protagonista encuentra una magnífica biblioteca de comics que nunca fueron dibujados. Pero la tristeza de tal imagen es traicionada por la alegría y el desenfado de la novela.

Cuaderno de viaje (Astiberri, 2006)
El aparentemente sencillo diario de un viaje nos acerca a la obra del estadounidense Craig Thompson. En Cuaderno de viaje, el autor de obras capitales como Blankets o Adiós, Chunky Rice nos regala una mirada de viajero frágil y melancólico aderezada con bocetos, apuntes y comentarios de su actividad diaria durante su viaje de París a Barcelona, pasando por Marruecos y Suiza.

Pyongyang (Astiberri, 2007)
El canadiense Guy Delisle nos descubre cómo es la vida en Corea del Norte según la visión aguda y nada complaciente de un supervisor de dibujos animados europeos realizados en la capital norcoreana reflejando de forma magistral el día a día en uno de los regímenes totalitarios más cerrados del mundo. Las anécdotas tragicómicas sirven de contrapunto frente al horror de la dictadura.

El Fotógrafo (Glénat, 2007)
De las experiencias del viaje de un grupo de Médicos Sin Fronteras hasta el corazón de Afganistán nació esta obra de arte que fusiona fotografía y cómic de manera ejemplar. La narración de Emmanuel Guibert, una historia hecha enteramente de realidad, es el material sensible del que se abastece el dibujante Guibert Lefèvre para recrearnos los sinsabores y las alegrías de la expedición.

Metralla (SinSentido, 2006)
En un Israel desgarrado por las tensiones de una guerra interna como escenario, el excepcional dibujante israelí Rutu Modan nos presenta Metralla. La historia, potente, delicada y afilada como navaja de afeitar, narra las vicisitudes de Kobi, un taxista de 33 años, quien después de encontrarse con Numi, amante de 21 años de su distante padre, cree que éste ha muerto en un atentado.

El sueño de México (Edicions de Ponent, 2004)
Extraordinaria road-movie en viñetas, con guión de Ramón de España y dibujo del mallorquín Bartolomé Seguí, que nos lleva de Barcelona a Menorca, con Santa Teresa, una idílica villa de México, al fondo de todo.
Está protagonizada por Carlos, publicista en crisis a causa del mal de amores, y Óscar, un amigo de juventud desaparecido años atrás que cuenta con un turbio pasado.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Yin Yang animal

Perlas a los Cerdos
Stephan Pastis
Dolmen Editorial, 2008
128 páginas – B/N
Precio: 10,95 euros
Isbn: 978-84-96706-81-1

¿Pueden imaginarse a un licenciado de Ciencias Políticas y Derecho en Berkeley, California, que abandona su trabajo como abogado para dedicarse a dibujar una tira cómica de desternillantes diálogos de besugos entre una rata arrogante e hija de puta y un cerdo idiota que come bacón? ¿Sí? Pues bien, dejen de hacerlo antes de que se les acuse de plagio. Porque ese mismo sería un somero resumen de la serie Pearls Before Swine - en nuestro país: Perlas a los Cerdos (Dolmen Editorial, 2008) - , del dibujante greco-americano Stephan Pastis (San Marino, California, 1968).

Perlas a los Cerdos gira en torno a dos personajes principales – Rata y Cerdo –, yin y yang del humor negro y absurdo acompañados por unos secundarios de lujo. Entre ellos destacan con todos los honores una cabra cerebral y reticente con aspecto beatnik alucinada por la profunda limitación mental de sus compañeros de tira y una cebra activista arquetipo de humor a rayas blanquinegras que negocia sin éxito una política conciliadora con los leones para que estos dejen de matar a sus compañeras de manada.
En definitiva, todo un monumento al humor negro inteligente con mucho de Gary Larson (The Far Side); Jim Davis (Garfield); Joscha Sauer (Nichtlustig); Jim Toomey (Sherman's Lagoon); Das Pastoras (Ustedes perdonen) o Michael Fry & T. Lewis (Over The Hedge) como también de Scott Adams (Dilbert); Groucho Marx y Woody Allen. Junto a su dibujo minimalista del tipo deconstructivista que ejemplifica perfectamente un regreso a lo básico que comparte con Charles Schulz (Peanuts); Perlas a los Cerdos es desde ya otra de esas piezas de referencia del humorismo internacional.

lunes, 1 de septiembre de 2008

Pura novela gráfica

Frente a aquellos autores que priman de forma absolutista el dibujo sobre el argumento, convirtiéndolo en secundario, casi inexistente - como Geof Darrow en Shaolin Cowboy, por citar un ejemplo –, Alfonso Zapico ha firmado con su Café Budapest (Astiberri, 2008) el paradigma de la novela gráfica. Y es que el primer trabajo publicado en nuestro país por este dibujante y guionista asturiano que ya ha visto editado en el mercado francófono La guerre du professeur Bertenev (Editions Paquet, 2006) - es precisamente eso: pura novela gráfica. Narración en viñetas engarzada a la perfección en un contexto histórico bien trabajado que nos lleva al final de la II Guerra Mundial y, concretamente, al nacimiento del estado de Israel. Este contexto sirve de lecho sobre el que fluye la historia ficticia del violinista judío Ychezkel Damjanich.
Pero el solido guión de este apasionante y bien narrado viaje de ida y vuelta entre la capital húngara y la ciudad de Jerusalén, viaje que recuerda por su temática y tratamiento a comics como el Maus de Spiegelman o Klezmer de Joann Sfar; y a películas como El pianista de Polánski, no implica un descuido en el dibujo. De hecho, Zapico domina el arte de la distribución de las viñetas de cada página, del discurso gráfico y del detalle. Leyendo al asturiano recordamos a dibujantes como el canadiense Craig Thompson o el japonés Taniguchi; la nouvelle vague de la BD francesa encarnada por Joann Sfar, C. Blain, Lewis Trondheim, Dupuis, Berberian o David B; a clásicos como Uderzo, Goscigny, Giraud, Hergé, Frankin; a grandes dibujantes españoles como Ivá, Víctor de la Fuente, Carlos Giménez, Paco Roca, Luís Durán, Tomeu Seguí…

jueves, 7 de agosto de 2008

Llaves desternillantes

Por fin se publica en nuestro país Lucha Libre, el primer número de uno de los comics más divertidos de los últimos años. Elucubrada por el guionista belga residente en Los Ángeles Thierry “Jerry” Frissen con la colaboración de los dibujantes Bill Déménage, Tanquerelle, Fabien M., Gobi y Witko, la serie nos presenta a the luchadores five, cinco latinos enmascarados con caretas de luchadores de catch mexicano que se dedican a defender East L.A. Y eso a pesar del total convencimiento por parte de sus convecinos de que son unos auténticos pringaos.Impasibles al desánimo, Red Demon, Dr.Pantera, Diablo Loco, King Karateka y Gladiador, líder de tan singular grupo de héroes, van enfrentándose a todo tipo de pandillas que acechan en la zona más peligrosa de la urbe californiana, a saber: hombres lobo especializados en el robo de radiocasetes con pasmosa facilidad para aliviar sus tripas; rednecks en camiseta de tirantes y calzoncillos con una mala hostia tan amenazante como su fúsil semiautomático; un clan de malvados franceses llamado Les Formidables, por otra parte acérrimos fans de Louis de Funes y para rematar la banda de Elvez, el más malvado, un enano latino y mafioso imitador de Elvis. Si a esto le añadimos al par de extraterrestres atrapados en un atasco en la Golden State Freeway que ha provocado un dinosaurio gigante extorsionado, al parecer, para que siembre el caos, podemos hacernos una idea aproximada del delirante argumento de Lucha Libre.

El resultado es un cómic amerimanga de gran calidad, estilísticamente muy cercano a Akira Toriyama (Dr. Slump y Dragon Ball), que te reduce con una llave desternillante de esas que te parten la caja de risa. Encantará tanto a los amantes de las películas de El Santo y Blue Demon.

Matrix lisérgico

Shaolin Cowboy
Geof Darrow
Panini Cómics, 2008
176 páginas – Color
Precio: 14 euros
ISBN: 978-84-96991-66-8

¡Cuidadín qué agarras con esa mano! Tal exclamación que parece sacada de la conversación entre dos novios fogosos es una sentida recomendación a todos los amantes del cómic. Porque el extraño, bizarro y surrealista tebeo sobre el que tratan estas líneas es obra de un autor con la misma fantasía alucinada de podría gastar un humano que acostumbrase a tomar LSD a cucharadas soperas. Vamos que no es digerible para todos los públicos.
Shaolin Cowboy Nº 01: La venganza del Rey Cangrejo y Mr. Excelente (Col. 100% Cult Cómics) recopila los seis primeros álbumes de Shaolin Cowboy, la última serie creada por Geof Darrow, el inigualable maestro de la narración gráfica y gran abanderado junto a Moebius del cómic como medio visual puro. Por desgracia, su obsesión por el detallismo y sus ocupaciones en el mundo del cine - fue uno de los imaginautas de la trilogía de Matrix - han hecho que su producción haya sido escasa aunque no por ello poco interesante, como dan fe sus colaboraciones con Frank Miller (Big Guy and Rusty the Boy Robot y Hard Boiled).
Shaolin Cowboy es, en definitiva, un delirio gráfico donde, como es habitual en Darrow, el guión es secundario. Aunque en honor a la verdad esta vez se ha superado en su desprecio hacia el argumento, La historia (¿?) narra las vicisitudes de un ex-monje shaolín de aspecto amigable que viaja por el desierto a lomos de un burro parlanchín y al que, por una razón u otra, todos quieren ver muerto, lo que da pie a todo tipo de orgías destructivas. Sobre este argumento (¿?) los delirios gráficos son constantes destacando un combate de jujitsu entre un hombre y un cangrejo o una ciudad a lomos de un dinosaurio.

Felis Domina Catus

Puede que sea el calor que enciende como un soplete en estos días de verano; o quiza sea un fetichismo recién descubierto, pero ¡Catwoman te pone! Siempre envuelta en su glamuroso halo de femme fatale a la vieja usanza, la mujer gato ha evolucionado, como si de un encargo de Max Mosley se tratara, hasta convertirse en el perfecto paradigma de vampiresa sexual con traje de cuero, látigo y botas altas.
Catwoman o Selina Kyle, su nombre de andar por casa y por la calle cuando no va dando mamporros, fue creada por Bill Finger y Bob Kane en la primavera de 1940 para la franquicia de Batman en DC Comics. Su posterior éxito provocó que la felina dominante tuviera su serie propia.

Ahora, Planeta DeAgostini ha recopilado, en un único volumen de casi 500 páginas, todas las historias de Catwoman previas a su colección mensual de cinco tomos que han sido escritas por el guionista de cómic norteamericano Ed Brubaker.


Con profusión de tópicos de serie negra - corrupción, drogas, oscuridad, cinismo…- y diálogos fluidos nacidos del manual de un perfecto guionista como Brubaker, las historias recogidas en esta edición integral atrapan tanto al aficionado del cómic de superhéroes, como a aquel otro que siente ciertos reparos hacia las historias de seres aparentemente adictos a los anabolizantes que no cejan en su empeño en salvar el mundo en pijama. Si a esto unimos el gran trabajo de Darwyn Cooke, Brad Rader, Cameron Stewart y Javier Pulido, dibujantes alejados de los estándares del cómic de superhéroes aún sin abominar de ellos, se puede afirmar con rotundidad que la compra de un cómic nunca ha sido una inversión tan buena como esta. ¡Miau!, felina dixit.

Visita al Gran Hermano


Pyongyang
Guy Delisle
Astiberri, 2005
184 páginas – Blanco y negro
Precio: 18 euros
ISBN: 978-84-95825-94-5
www.astiberri.com

Exceptuando V de Vendetta, de Alan Moore y David Lloyd, el ambiente opresivo de la novela de política ficción 1984, de George Orwell, jamás ha estado tan bien representado en el mundo del cómic como en Pyongyang (Astiberri, 2005), una de las mejores novelas gráficas - documentales de los últimos años. Fiel a la línea de otros grandes autores como Joe Sacco, David B. o Carlos Jiménez, el autor canadiense Guy Delisle desentraña con ironía, sarcasmo, melancolía y mala leche en las contradicciones del brutal régimen estalinista impuesto en Corea del Norte, hace 60 años, al más puro estilo del Gran Hermano siempre vigilante por Kim-il Sung y perpetuado por su hijo Kim-Jong Il.
Guy Delisle vivió en Pyongyang, capital de Corea del Norte, durante unos meses trabajando como supervisor de una serie de animación francesa que era realizada en un estudio de animación local – la hipocresía de las tendencias globalizadoras de deslocalización y abaratamiento de costes subsiguiente -, por lo que tuvo una oportunidad inmejorable de describir la vida cotidiana en un país cerrado a cal y canto a los visitantes extranjeros.
Precisamente uno los grandes aciertos del autor québécois reside en la fluidez con la que hace discurrir una historia que borda el arte secuencial al más puro estilo Eisner. En cuanto al dibujo, nos encontramos ante un cómic sin ningún tipo de pretensión estético experimental; un feísmo deliberado parecido al de Maus de Spiegelman. Delisle no toma ningún riesgo; renuncia a cualquier tipo de experimentación en cuanto a encuadres u organización de viñetas, dando una inestimable categoría de reportaje a esta gran obra.

Frikismo yankee

Peter Bagge (Peekskill, Nueva York, 1957), grandísimo autor que ha dado el cómic underground estadounidense, firmó con Studs Kirby una de sus obras más delirantes y divertidas que sería paso previo a la célebre Odio. Recogidas ahora por Ediciones La Cúpula en una edición cuidada y muy económica, estas historias cortas nacidas en plena etapa Reagan de un locutor de radio ultraconservador, alcohólico, colérico y partidario de las armas, entre otras flores, no dejan títere con cabeza en la defensa de los valores de la América profunda. Estos suponen la quintaesencia de un conservadurismo social cuyo absurdo parece haber sido imitado por cierto ‘popular’ locutor nacional nuestro que parece querer recuperar la categoría de ‘reserva católica de Europa’ para este país.

En Studs Kirby, Bagge recogió la herencia de maestros del underground estadounidense como Robert Crumb, Harvey Pekar o Gilbert Shelton. Por ejemplo con Crumb comparte el expresionismo del dibujo y una actitud ligeramente benevolente hacia personajes que no tienen miedo a no caer bien a todo el mundo; con Pekar, el uso de anécdotas mínimas, triviales en apariencia, pero muy reveladoras en el fondo de la complejidad de los personajes. Finalmente, el espíritu de Shelton está presente a través de auténticos freaks como, por ejemplo, el personaje del profesor loco experto en conspiraciones políticas que pudo haber sido diseñado tranquilamente por el genial creador de los Fabulosos Freak Brothers. Por cierto, Studs Kirby gustará mucho a los cinéfilos amantes de El gran Lebowski.

Ni Puta Gracia (Planeta DeAgostini, 2007)













Acostumbrados como estamos a traducciones de títulos, en especial cinematográficos, que parecen la obra de un alucinado, es muy de agradecer encontrarse con una en la que se han bordado los sentidos literal y secundario con primoroso punto de cruz. Ni Puta Gracia es la traducción políticamente incorrecta de Nichtlustig, título original de la obra de Joscha Sauer (Francfort, 1978).

Demasiado incisiva para los que afirman, con toda razón, que la traducción literal sería «Sin gracia», aquellos otros que gozan con el humor surrealista, pleno de negritud, ternura y cierta mala baba, desplegado por el alemán en sus gags de viñeta única – la mayoría -, jalean sin dudar la licencia libertaria del traductor. Incluso Sauer fue el primero en creer que su peculiar sentido del humor jamás iba a ser entendido. Todo cambió cuando su web http://www.nichtlustig.de/ creada en 2000 se convirtió en fenómeno de culto con casi 300.000 visitas diarias.

Son varios los personajes recurrentes que aparecen en los distintos volúmenes de NPG. Los más destacados son los lemmings, esos roedores de la tundra con una curiosa tendencia al suicidio en masa; el Robot asesino NF-700, que cuida niños en una guardería; la pareja de científicos locos Wilson & Picket; el vecino emparedado, la oveja coqueta enamorada de una Muerte que busca clientes con métodos cada vez menos ortodoxos; Yetis, dinosaurios, extraterrestres... Todos ellos, figuras esenciales del universo de Sauer, consiguen equipararle a Gary Larson, creador de la legendaria The Far Side.

domingo, 11 de mayo de 2008

Inner City Blues (Glénat, 2007)





















Inner City Blues
Brüno, Fatima Ammari
152 páginas - Color
Precio: 18,00 €
ISBN: 978-84-8449-952-7

http://www.edicionesglenat.es/

Para todos aquellos compulsivos consumidores de cómic del tipo urraca común (pica pica) basta con que un tebeo tenga la portada de vivos colores, más bien tirando a chillones, para que, irremediablemente, quieran llevárselo a su nido. Yo soy uno de ellos. Si a este hecho, pronto en estudio psiquiátrico, se le añaden referencias musicales – «Inner City Blues (Make Me Wanna Holler)» es el título del último single en vida de Marvin Gaye, extraído de su célebre álbum What's Going On - y cinematográficas – en la contraportada es anunciado como «tebeo blaxploitation en estado puro» - el impulso de arrancárselo de las manos al librero ya resulta incontrolable.
Inner City Blues (Glenat, 2007) ha sido la primera referencia en nuestro país del team formado por el dibujante Brüno y la guionista Fatima Ammari-B. Reúne en un tomo integral los tres álbumes que, originalmente, fueron editados por separado, en Francia, entre 2003 y 2005.
El excelente trabajo gráfico que abarca desde la línea clara franco-belga hasta las viñetas que recuerdan a Robert Crumb, junto al colorido hippie-pop-lisérgico, sirven a Brüno para alcanzar una lograda recreación del black power setentero. El rizado de rizo afro lo pone Fatima Ammari-B confeccionando una cuidada banda sonora a través de constantes referencias al jazz de Art Blakey o Duke Ellington; al soul de Isaac Hayes o Curtis Mayfield. Incluso el propio Jimmy Smith tiene un cameo a modo de estrella musical invitada.
Aunque la trama no sea nada original, este tebeo hará las delicias de los fanáticos del cine de mafiosos de baja estofa, del de Abel Ferrara al citado Tarantino o del blaxploitation de Foxy Brown y la emblemática Shaft. Dividida en tres partes entrelazadas por constantes flashbacks, Inner City Blues se vertebra a través de la historia de los hermanos Brown, dos ladrones de coches de Inner City que cometen el craso error de robarle el coche a uno de los cabecillas de la mafia local. A cambio de no matarles, los Brown terminan convertidos en sus matones y poco más tarde en sus hombres de confianza. Así inician una lucrativa carrera en la mafia afroamericana - al estilo de American Gangster de Ridley Scott - entre sexo, drogas y soul.