lunes, 25 de mayo de 2009

Prototipo (La Cúpula, 2009)







Prototipo
Ralf König
Ediciones La Cúpula, 2009
116 páginas / color
precio: 18 euros
ISBN: 978-84-7833-857-3

Humor inteligente lleno de dobles sentidos y reflexiones creacionistas con mucha guasa. Esta es la oferta, en cantidades exportables, propuesta en Prototipo (La Cúpula, 2009) por Ralf König. En esta ocasión, el genial autor alemán creador de El condón asesino, El hombre deseado o Huevos de Toro dirige su humor afilado a lo primero de todo, al Principio de los Tiempos, a la línea de flotación: a la Creación. Allí, en el Jardín del Edén, paraíso del aburrimiento de seres supuestamente felices, donde la pura existencia es la única actividad posible, los personajes principales - un Adán, en principio sumiso y alienado que después de un mordisquillo a la manzana del conocimiento se vuelve crítico y rebelde; un Dios muy humano, en lo bueno y en lo malo, que habla en letras góticas; y una Serpiente del árbol de la Ciencia, cínica y pragmática - se enfrascan en disquisiciones filosóficas a tres bandas sin desperdicio. Por supuesto que al final también aparece Eva «pá que no falte de ná». Así, a lo largo de 110 páginas, König desmitifica y desmonta algunos de los pilares religiosos básicos como el pecado, el deseo, el conocimiento, el libre albedrío, la sumisión a Dios, el papel del Hombre en el mundo... a través de las conversaciones de los mencionados personajes. Y lo hace siempre desde una perspectiva sencilla y honesta, sin caer en la crítica burda o el proselitismo descarado. Este es, sin duda, uno de los grandes méritos de Prototipo. Sobre todo a sabiendas de que el alemán, homosexual declarado y militante, pertenece a un colectivo denostado a menudo por la mayoría de las religiones - que lo consideran compuesto por «enfermos descarriados a los que hay que tratar, curar y recuperar» - y le sería muy fácil ponerse a saldar cuentas. Ralf König (Soest, Westfalia, 1960) publicó su primeros cómics a principios de los ochenta. Ya entonces afirmó un estilo reconocible y personal, cercano al trazo minimalista de Claire Bretéche, donde fundía lo naturalista, lo fantástico y lo underground en el trato de su tema predilecto, es decir, la narración en historias breves, con humor y una buena dosis de autoparodia, la vida cotidiana de los homosexuales. Es a partir de 1987, cuando después de ver publicados El condón asesino, una parodia de novela negra, y El hombre deseado, König se convierte en un referente del cómic para todos los públicos y todos los sexos. Hasta hoy, sus libros han sido traducidos a 13 lenguas y vendido cerca de siete millones de ejemplares lo que hace de él el autor de cómic gay más famoso del mundo. Además, cuatro de sus libros han sido adaptados al cine, otros al teatro y al teatro de marionetas. En 1994, la adaptación cinematográfica de El hombre deseado alcanzó 6,5 millones de espectadores, uno de los más grandes taquillazos de la historia del cine alemán.