My Brain Is Hanging Upside Down
David Heatley
Norma Editorial, 2009
128 páginas / color
Precio: 29,95 euros
ISBN: 978-84-9847-887-7
En este mundo hay mucho sinvergüenza. De todo calibre. Y tampoco hay que mirar lejos de uno ni buscar personajes recurrentes. Todos conocemos docenas de ellos en nuestros círculos más cercanos. Pero no todos son capaces de convertir su falta de vergüenza en genialidad.
Al igual que otros dibujantes de cómic como Joe Matt, Jeffrey Brown o Ramón Boldú, el estadounidense David Heatley (Teaneck, Nueva Jersey, 1974) es un perfecto ejemplo de ‘sinvergüenza artístico’, en el sentido más concreto y admirable del término. En su inmensa My brain is hanging upside down (Norma, 2009), primera obra del autor publicada en nuestro país y que lleva el mismo nombre que el famoso tema de Ramones, éste desnuda su alma hasta grados abrasadores de vergüenza ajena, en primera persona y / o a través de reveladores y estrambóticos sueños. Pero su forma de narrar, divertida, bizarra y en ocasiones entrañable, ha hecho que, hoy, Heatley esté considerado como uno de los más importantes dibujantes pop de la nueva generación de autores independientes americanos y que publique regularmente en The New York Times, New Yorker...
En la abigarrada sucesión de viñetas ofrecida por David Heatley en My brain is hanging upside down se apretujan, divididas en cinco grandes capítulos – «Historia sexual», «Historia negra», «Retrato de mi madre», «Retrato de mi padre» e «Historia familiar» -, sus experiencias vitales como miembro de una familia desestructurada en Nueva Jersey; sus extraordinarias y poco convencionales experiencias sexuales, sus fracasos amorosos, su fascinación por la cultura afroamericana, las extrañas relaciones mantenidas con su madre, su difunto padre y su nueva familia: su mujer Rebeca y sus dos hijas.