El
fenómeno de la novela gráfica resulta imparable, incluso en esta época de vacas
flacas que todos sufrimos. El número de lectores aumenta de forma geométrica y
los medios de comunicación incluyen en sus secciones culturales noticias
relacionadas con el que muchos ya llaman Noveno Arte. Es cierto que aún se
sigue estando muy lejos, lejísimos, de las ventas de Francia o Japón, países
donde un tebeo convertido en best-seller puede alcanzar tranquilamente los
100.000 ejemplares vendidos. Pero la popularización de los cómics y su
reconocimiento como expresión artística ya es un hecho incontestable.
Para
saciar la sed del curtido lector de cómics y / o para descubrir este
maravilloso mundo al lector neófito regresa esta lista de recomendaciones, una
selección de novedades interesantes de todo pelaje y gran interés.
Los amantes de la Historia y de sus
historias disfrutarán con títulos como Tormenta sobre China (Glénat, 2011),
reedición en un integral de la serie de Roger
Lécureux y Paul Gillon que, nacida
en 1950, narra la llamada Gran Marcha que permitió a Mao proclamar la República
Popular de China en 1949; Modotti (Sins Entido, 2011), del
salmantino Ángel de la Calle, lujosa
reedición integral de la biografía de la fotógrafa y revolucionaria italiana Tina
Modotti muerta en Ciudad de México, en 1942, en circunstancias nada claras; The
'Nam (Panini, 2011), de Doug Murray y Michael Golden, la ‘crónica mensual’ relatada desde dentro de uno
de los conflictos más traumáticos vividos por los EE.UU.: la Guerra de Vietnam;
En
un cielo lejano (Norma, 2011), de Hugo
Pratt, la bella de historia, otra más del maestro italiano, de lealtad,
amor y muerte de un piloto transalpino en Abisinia Oriental durante la II
Guerra Mundial; o El paraíso de Zahra (Norma, 2011), la denuncia por parte de
dos dibujantes iraníes, que firman con el seudónimo de Amir & Khalil para evitar represalias, sobre la represión de
las manifestaciones de protesta que tuvieron lugar en Teherán, en junio de
2009, contra el fraude en la elección del presidente Mahmoud Ahmadinejad.
En España, el cómic también ha servido
para denunciar la situación sociopolítica que sufrimos. Éste es el caso de Yes
We Camp! (Dibbuks, 2011), obra coral centrada en las razones de las
acampadas espontaneas de indignados acontecidas, durante 2011, en centenares de
plazas de ciudades y pueblos de todo el país.
Aunque si de protestar contra el sistema
se trata, entonces la recomendación es la edición integral de Peter Punk (La Cúpula, 2011), el
subterráneo, cachondo, surrealista y carismático personaje de Max.
Y ya que estamos podemos darnos un garbeo
por el lado oscuro con 100 Balas Vol. 4 (Planeta, 2011) de Brian Azzarello y Eduardo Risso e Incógnito 2: Malas influencias
(Panini, 2011), de Ed Brubaker y Sean Phillips, dos series negras que
rezuman misterio, tráfico de influencias, corrupción, crimen…
Claro
que si lo que preferimos es embarcarnos en un barco por el Nilo Blanco para un
apacible viaje que se convierte en pesadilla, el elegido ha de ser, sin duda, Sudd
(Glénat, 2011), de Gabi Martínez y Tyto Alba.
Para
aquellos otros que amen las aventuras en el mar, subidos en un velero bergantín
de principios del siglo XIX, disfrutarán como pequeñuelos con la lectura del
integral de Bruce J. Hawker (Ponent Mon, 2011), de Vance y Duchâteau, un clásico entre clásicos de los cómics de
aventuras de la historieta franco-belga.
Esta
acelerada, variopinta y reconcentrada recomendación lectora termina con tres
títulos muy diferentes entre sí pero que combinan surrealismo en su fondo,
forma y mensaje. Se trata del clásico de la ciencia ficción Final
Incal 2: Luz de garra (Norma, 2011), de Jodorowsky y Ladrönn; Informe
sobre ciegos (Astiberri, 2011), de los argentinos Ernesto Sábato y Alberto
Breccia ; y Plétora de Piñata (Astiberri, 2012), de Mauro Entrialgo, uno de los autores con mayor agilidad mental de
nuestro país.
Ah,
y con Jukebox (La Cúpula, 2011), de Charles Berberian, me voy con los cómics y la música a otra parte.